En música, el compás es la división de una línea musical en compases marcados por tiempos fuertes y débiles, representados en la notación musical occidental por un símbolo llamado indicación de compás. El compás describe el concepto de medición de unidades rítmicas, pero también puede usarse como descriptor específico de una obra, representado por la indicación de compás: «Esta música está en compás de 4/4» equivale a decir «Esta música está en compás de 4/4» o «Esta música está en 4/4». El compás se distingue del ritmo, ya que este último se identifica como patrones de duración, mientras que el compás implica nuestra percepción inicial, así como la anticipación posterior de una serie de tiempos que extraemos de la superficie rítmica de la música a medida que se desarrolla en el tiempo. La música amétrica incluye el canto llano, algunas partituras gráficas surgidas desde la década de 1950 y música folclórica no europea, como el repertorio honkyoko para shakuhachi.